sábado, 19 de julio de 2008

Liquidación

Uno de los efectos más tristes de la grave crisis económica española es el cierre de los pequeños establecimientos comerciales. Los grandes almacenes, las cadenas de tiendas, estarán pasando unos meses malos, pero sobrevivirán; los pequeños comercios no. Algunos de los que cierran son los sitios en los que tú comprabas desde hace años, y eso te rompe el corazón.

Las cafeterías cierran de un día para otro. Las tiendas lo anuncian con tiempo, con un cartel en el escaparate que siempre empieza con la palabra "Liquidación"; en algunos casos se aclara que la liquidación es "total", en otros no. Curiosamente, tras andar mucho por Madrid, sólo he encontrado un cartel que diga la verdad: "Liquidación total por cierre". En los demás casos se miente y se dice:

"Liquidación por reforma"

"Liquidación por cambio de negocio"

"Liquidación por jubilación".


¿Se ve claro el truco? Se trata de apelar a cosas positivas, alegres, que en los tiempos buenos hubieran significado que el negocio iba bien: "porque gano dinero puedo hacer obras, porque gano dinero me puedo jubilar, porque gano dinero quiero ganar más cambiando el negocio". Ahora no: creo que se trata de que entres a comprar, a aprovecharte de los despojos, con la conciencia tranquila: colaboro en una buena causa, les ayudo a pagar la obra, a tener una buena jubilación. Las malas noticias ("por cierre") te quitan la alegría de gastar.

En medio de toda esta tristeza, sólo hay una cosa que te hace sonreir: las inmobiliarias, que tanto han abusado estos años,que tanto dinero fácil han hecho, han sido las primeras en cerrar (lo lamento por sus empleados, claro). ¿No es divertido ver que el local de la inmobiliaria A, que todavía tiene su cartel puesto, está ahora en alquiler por la inmobiliaria B, en una victoria póstuma de los enemigos?

3 comentarios:

Ramón_Lozano dijo...

Ésa es una de las consecuencias de esta crisis y de la que apenas se habla. Son los pequeños comerciantes los que más van a sufrir entre el comercio y medidas como la liberalización de horarios no hará más que ahogarles un poco más, excepto aquellos que arriesguen y tengan suerte por su ubicación estratégica o por su oferta exclusiva.

un saludo

Juan Ignacio dijo...

He tomado hoy conciencia de esa crisis leyendo algo en un diario local.
¿Qué perspectivas de mejora hay?

Fernando dijo...

Querido Ramón:

El tema de la liberalización de horarios es muy delicado. Trae malas consecuencias, como la destrucción del pequeño comercio, pero tambien otros beneficiosos, como más competencia y más comodidad para el consumidor. A lo mejor habría que hacer un post sobre el tema.

Querido Juan Ignacio:

Yo diría que las posibilidades de recuperación son del 0%: si el gobierno empieza por no querer usar la palabra crisis y sólo la empezará a usar cuando no quiera usar la palabra recesión hay que suponer que no está haciendo NADA para evitar el naufragio.

F.