viernes, 19 de septiembre de 2014

Sólo

Sólo la fe en Jesucristo me impide caer en la desesperación por la maldad y la estupidez de los demás.


Sólo la fe en Jesucristo me impide llegar hasta el final de mi maldad y mi estupidez.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Sello

Escribo una carta de agradecimiento al Cardenal Rouco. Ha sido mi Obispo durante 19 años y ahora se jubila.


Busco los sellos que sobraron de la última Navidad. Son de 0,37 €. Consulto la tarifa vigente. Es 0,38 €. Necesito un sello de 0,01 € (un céntimo de euro).


Voy a la sucursal de Correos. Es un antiguo almacén reconvertido en sucursal, sin ventanas, sin aire. Las mujeres del barrio, con los brazos al aire, se abanican con la cartas que van a mandar y todo huele a humanidad. Tardo mucho en llegar al mostrador. Me atiende un joven amable de aspecto anarquista. Lleva una camiseta que pone "Todo me la suda", es decir, "todo me da igual". El "la" es el pronombre del aparato genital masculino. Le pido un sello de 0,01 €. No tiene. Me ofrece que le lleve la carta, él pondrá un tampón con el céntimo que falta. Me da miedo dársela. Me recomienda que vaya a la central, en el Palacio de Comunicaciones de Cibeles. Me parece una opción mejor.


El funcionario de Cibeles que me toca está ayudando a un chico a hacer un paquete que revienta por todos los lados. Me fijo en una papelera, hay ahí tirada una peluca negra. El funcionario me atiende, le pido el sello de 0,01 €.  "Tiene suerte, sólo yo tengo estos sellos en Madrid"."Ah", respondo. El sello es triste, gris oscuro, sale la cara del antiguo Rey Juan Carlos, también con gesto triste. Es el pasado que vuelve siempre siempre a nuestra vida.


Echo la carta en un buzón cerca de casa, al lado de donde los chicos jóvenes van a beber 5 botellas de cerveza por 5 €, lejos del Cardenal, lejos del Rey.


(Oh feliz coincidencia: quiso la casualidad que unas horas antes, a pocos metros de donde compré el sello, la odiada alcaldesa de Madrid hubiera anunciado que no se presentará a las próximas elecciones municipales. Justo ayer deseé su marcha, tras tener que esperar 25 minutos un autobús público.)

lunes, 8 de septiembre de 2014

Libro

Sorprendentemente, la lectura del Sermón de la Montaña deja de emocionarme. Leo en el amanecer "Jesús subió a la montaña" y no vuelvo a recordarlo en todo el día. Qué pena.


Comienzo a leer un libro sobre el Sermón de la Montaña. Nada profundo, claro está. "Si Mateo dice que Jesús subió es que la acción comenzó en un valle o en una llanura". Esto me ayuda y me acuerdo muchas veces durante el día de Jesús en el valle, disponiéndose a subir, rodeado de gente.


Hoy me toca la explicación a "Bienaventurados los pobres de espíritu". Siempre ha sido un texto oscuro para mí. Veremos qué dice.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Madrid

Misterioso calor veraniego.


Por la calle: más pobres que antes de vacaciones y más insistentes.


El Ayuntamiento cambia las marquesinas nuevas de las paradas de autobús por otras marquesinas nuevas. Imposible no sospechar.


Los árboles se caen a trozos. Han muerto ya varias personas por ello. Desde mi ventana, en la noche, veo a los bomberos cortar ramas y troncos. Soy niño de ciudad: me sorprende la cantidad de polvo (serrín) que salta.