Paso frente al Congreso de los Diputados.
Vísperas de otoño caliente: la Policía ha hecho una muralla de vallas. Basta con mover unas pocas para que los coches y los peatones no se puedan acercar al Parlamento.
Vísperas de otoño frío: los policías jóvenes charlan, todos van en camisa, salvo uno bajito que ya lleva el jersey de manga larga.
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4 comentarios:
Otoño caliente ó frío que no cambiará nada en nuestra grises vidas.
Besazo
Que se decida tu otoño, porque acá la primavera nos tiene a todos con ropa ligera.
Que tu Congreso haga bien las cosas.
Saludos, querido Fernando
Tú lo has dicho. Otoño caliente es lo que nos espera
Nuestras vidas nunca son grises, Dolega: ni la tuya ni la mía lo son.
Ay, Alemamá, siempre te digo lo mismo, reza por nosotros porque nos hace falta.
Y más en Madrid y en Barcelona, Páterfamilias.
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