Ayer la Junta Electoral Provincial prohibió la concentración de la Puerta del Sol. En otras provincias han ocurrido hechos similares. Lo peor no es que los reunidos no cumplieran la orden, sino que la Policía tampoco se dio por enterada.
Los políticos del Partido Socialista ya están manipulando los hechos, hallando similitudes entre su programa electoral y las pretensiones de esta gente. Se han apresurado a decir que no fueron ellos los que pidieron a la Junta que se pronunciara sobre la concentración ilegal; los del Partido Popular tampoco han tenido el valor de decir "sí, fui yo el que lo pidió ante el riesgo obvio de influencia en la jornada electoral".
Los concentrados en Madrid insultaron y empujaron a los periodistas de los medios de comunicación de derechas. Qué democracia real tan rara si molesta la libertad de expresión.
Comento esto con algunas funcionarias del trabajo, con un camarero, con un vecino, todos ellos de clase media. Con asombro compruebo que todos simpatizan con "estos pobres chicos" y con sus reivindicaciones, aunque no las han leído. Cuando afirmo que deben irse de Sol me miran atónitos, como si yo fuera Hitler. Esto me confirma en la necesidad de que no sigan ahí el sábado (jornada de reflexión) ni el domingo (día de votación): no queremos otra jornada como las posteriores a los atentados de 2004, cuando ganó Zapatero.
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6 comentarios:
Ayer, cuando leí tu entrafa, no me atreví a opinar porqie no tenía elementos de juicio. Hoy, que ya he visto el percal, pienso como tú.
Lamentablemente creo que estoy muy lejos (en todo aspecto) para opinar...
Sin conocer mucho el tema ni las reivindicaciones, por intuición diría que muchos de los concentrados son realmente chicos con buena intención, de rebeldía, de queja
El problema es que hay quien es especialista y sabe a provecharse de su "actividad" para sus propios intereses.
Y se esconden tras la buena voluntad de los "rebeldes"
Gracias por la informacion de tus entradas. Me he quedado intrigada, ahora buscaré sus reivindicaciones.
GEnial viernes a todos
Según pasan las horas todo se va aclarando, Paterfamilias; es lamentable que España no sea un Estado de Derecho.
Entonces reza por nosotros, Juan Ignacio, para que esta historia no acabe mal.
Así es, Miriam, sin duda que mucha gente está ahí de buena fe, pero con grave riesgo de ser manipulados por gente sin escrúpulos.
Hoy estuve leyendo un poco en el diario. En La Nación on line le dan un titular enorme y lo llaman: "El Mayo español se extiende a otros países del mundo". ¿Será para tanto?
Lo malo no es eso, Juan Ignacio, sino que los alemanes y los ingleses dicen que nosotros estamos copiando a Egipto o a Libia, esa es la opinión que tienen de España.
Merecida, quizá.
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