lunes, 16 de mayo de 2011

Madrid

La chica corre para coger mi autobús. El conductor reduce la marcha. Miro la cercana parada, no hay nadie esperando. Una de dos: el conductor es un buen hombre que va a parar; el conductor es un sádico que acelerará al acercarse, dejando a la chica en tierra tras crearle esperanzas.

La chica tiene suerte: es un buen hombre.

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Cartel en mi barrio:

"Se busca cantante
para grupo de rock
(ni muy punky
ni muy heavy)"


.

Asombrosamente, la historia de las bolsas tiene su epílogo. Pasé por el súper a la vuelta del trabajo, aún de traje. "¿No trae usted SU bolsa?"."No", respondí humilde. La cajera me miró atónita, como si le hubiera dicho que no llevaba dinero. "Por esta vez le daré una bolsa gratis, de las antiguas, pero la próxima vez traiga SU bolsa". "Muchas gracias".

7 comentarios:

paterfamilias dijo...

Es que mira que ir sin tu bolsa ... ;-)

AleMamá dijo...

Te van a decir: ¡La bolsa o la vida!

Buen resumen madrileño.

maria jesus dijo...

De ahí a que te acusen de ir contra el medio ambiente, hay un paso.

Ese conductor de autobus es extraterrestre.

Juan Ignacio dijo...

Ah, son bravos con las bolsas eh.

(La sociedad de hoy es exigente: Para completar el perfil de buen hombre,
el chofer deberá demostrar misma delicadeza cuando suceda lo mismo con una
señora mayor).

Fernando dijo...

No la voy a llevar al trabajo, metida en el bolsillo, Paterfamilias.

Gracias, Alemamá.

La chica me miró como si pretendiera prender fuego a los Picos de Europa, María Jesús.

En Madrid hay muchos conductores de autobús muy crueles, Juan Ignacio, les da igual que el viajero sea mayor o enfermo. Por eso tuve la sospecha de que iba a acelerar y dejar a la chica en tierra.

Miriam dijo...

Me fascinan estas entradas de detalles del día, de autobuses, cantantes, cajeras y bolsas
Me fascinan y me alegran el día

Fernando dijo...

Muchas gracias, Miriam, eres muy amable.