lunes, 24 de junio de 2013

Funcionarios de España

El pequeño Ayuntamiento tiene 4 funcionarios: la secretaria, el policía (que también es el cobrador de impuestos), el albañil (que también es el enterrador) y el electricista. Con los ingresos que tiene el Ayuntamiento no puede pagar más sueldos.

Viene una empresa inmobiliaria y decide construir 50 chalets. El Ayuntamiento empieza a cobrarle impuestos. También empieza a cobrar impuestos a los nuevos vecinos.

El alcalde es un hombre con visión de futuro. ¿Por qué cada funcionario se va a dedicar a dos cosas? Crea una plaza de cobrador de impuestos (antes lo hacía el policía) y otra de enterrador (ante lo hacía el albañil). Ya hay 6 funcionarios.

Al alcalde le molesta que la secretaria del Ayuntamiento le tenga que pasar sus cartas privadas. Crea otra plaza de secretaria, pero sólo para él. Pone ahí a una mujer hermosa, poco estricta en sus costumbres. Y como le molesta que el policía se vaya a patrullar y deje el Ayuntamiento sin protección, crea otra plaza de policía. Ya hay 8 funcionarios.

La empresa inmobiliaria construye 50 chalets más. Más vecinos. Más impuestos. Se crea otra plaza de electricista (más farolas), otra de policía (más delitos), otra de cobrador (más impuestos), otra de secretaria (más papeles). Ya hay 12 funcionarios.

Los nuevos vecinos son más finos que los antiguos. Les molesta tener que ir a la ciudad vecina a pedir un libro o a hacer deporte. El alcalde construye una biblioteca y un polideportivo. En la primera pone 4 funcionarios nuevos (un jefe, 2 para atender al público, un vigilante) y en el segundo otros 4 (un jefe, 2 para atender al público, un vigilante). Ya hay 20 funcionarios.

La empresa inmobiliaria construye 50 chalets más. Más vecinos. Más impuestos.

Es preciso crear un departamento de personal (3 funcionarios: 1 jefe + 2 secretarias),  otro de archivo (3 funcionarios: 1 jefe + 2 secretarias), otro de registro (3 funcionarios: 1 jefe + 2 secretarias), más policías (3), más electricistas (2), otro enterrador (1), más albañiles (2), un asesor de imagen (1) y un jefe de gabinete (1). El pueblo se convierte en un pueblo con mucho futuro: llega a 39 funcionarios.

Los bancos dejan de dar créditos a la empresa inmobiliaria.

La empresa inmobiliaria ya no puede vender pisos.

La empresa inmobiliaria suspende pagos y deja de pagar los impuestos.

Parte de los nuevos vecinos tampoco pueden pagar sus impuestos: trabajaban en la empresa inmobiliaria que ha dejado de pagarles sus sueldos.

El alcalde ya no cobra impuestos y no puede pagar los salarios de sus 39 funcionarios. En el Partido le encuentran un buen puesto, lejos: dimite y se va.

10 comentarios:

AleMamá dijo...

Parece un cuento tuyo, pero se oye muy real; ¿es así? si es ficción, está muy bien escrito, suena real.
Saludos

Luisa dijo...

Jope Fernando ¿Estás insinuando siquiera que sobran funcionarios? :)
Pues yo...¡me quedo!

Y si no, que lo hubieran previsto antes los cabeza pensantes de este país.

Si al menos tuviese un trozo de tierra...

Besos mil

javier dijo...

¡Qué cuento ni qué nada! Parece el "Inside Job".

ALMA dijo...

Para ser totalmente real faltan los retornos o coimas como se dice por aqui.

Muy buen post

Fernando dijo...

La historia es invención, Alemamá, pero los elementos están tomados de la vida real de España. Ésta es una de las causas de nuestra ruina actual.

Pos... ¡yo también, Luisa, que no tenemos la culpa de la estupidez de los políticos!

Usted sí que sabe, Don Javier.

Bueno, Alma, un % de los 29 funcionarios son amigos, familiares o del Partido. Es otra forma de coima, sin duda.

ojo humano dijo...

Si es una historia de ficción está excelente, me encantó el ritmo.
La vida real es aún un poco más...
Parte de la cruz que llevamos...
y que pagamos.

Anónimo dijo...

Buenos días Fernando. Breve reseña del drama municipal de la mayor parte de las poblaciones costeras o próximas a capitales... Suma el consumo de las farolas, el mantenimiento, revisiones y limpieza de instalaciones, etc. menos mal que por ahora están las diputaciones repartiendo algo. Si hubiera contratado servicios o repartido riqueza mancomunando con otros municipios, pero no, la avaricia es como la pez. Un abrazo.

Fernando dijo...

En España desde luego que sí, Ojo Humano: una cruz que hunde nuestra economía y nuestra vida, con impuestos insoportables.

En toda la Comunidad de Madrid se da este drama, NIP, incluso en los pueblos pobres de la sierra, donde los alcaldes demagogos han aumentado los gastos como si el boom inmobiliario fuera a ser eterno.

Juan Ignacio dijo...

muy interesante explicado como siempre

Fernando dijo...

Gracias, Juan Ignacio: todo se refiere a un problema bien grande que tenemos en España, difícil de resolver. Gracias.