viernes, 30 de marzo de 2012

Huelga general

En la madrugada funcionan toda las televisiones, salvo la pública regional Telemadrid.

Voy al trabajo de incógnito, sin chaqueta, sin corbata.

No han retirado la basura. Los cubos siguen en la calle, llenos.

Como hace dos años, no funciona el autobús: voy en Metro y me doy un agradable paseo matutino hasta la Oficina.

¡¡Conmoción!!: la Cafetería de la Oficina ha hecho huelga. Podría haber cerrado el Servicio Jurídico, la Biblioteca, el Registro, pero ¡¡¡lo ha hecho la Cafetería!!!

Saludo a algunos funcionarios que no vienen nunca a la Oficina. Hoy hay que venir y firmar, si no te descuentan un día en la nómina.

A media mañana oigo gritos desde mi despacho y bajo corriendo a la calle. Es un piquete informativo, una manifestación de unos 50 señores y señoras, sin pancartas, sin pegatinas, que pretenden coaccionar a la gente que ha abierto. En la puerta del Centro Comercial ya está la Policía, sólo 5 agentes y una moto cruzada bastan para frenarles. Intentan entrar por otra, pero allí también hay 5 agentes y otra moto.

A la salida del trabajo sigue sin haber autobús. He de darme otro paseo y volver a coger el Metro, lo que ya no me hace ninguna gracia: hace calor y tengo hambre.

...

Desde ahí hasta la noche todo fue normal, como otro día cualquiera, salvo el helicóptero de la Policía, alguna tienda cerrada y la basura en la calle.

6 comentarios:

Juan Ignacio dijo...

Muy buena esta: "Voy al trabajo de incógnito, sin chaqueta, sin corbata".

"Saludo a algunos funcionarios que no vienen nunca a la Oficina. Hoy hay que venir y firmar, si no te descuentan un día en la nómina." Nosotros los llamamos "ñoquis", porque es costumbre comer choquis los días 29 y ellos, al igual que los ñoquis, aparecen a fin de mes.

Andy dijo...

Qué gracia me hace eso de "piquete informativo". En fin, sobre esto ya hablé en la última huelga.

Me alegro que pudieras ir al trabajo con normalidad. Me ha resultado curioso eso de los funcionarios que no aparecen nunca y han venido a firmar...

Un abrazo.

AleMamá dijo...

Dentro de todo el desbarajuste, ¡esto es lo peor!
"¡¡Conmoción!!: la Cafetería de la Oficina ha hecho huelga. Podría haber cerrado el Servicio Jurídico, la Biblioteca, el Registro, pero ¡¡¡lo ha hecho la Cafetería!!!"

Todo lo demás nos da el tono de lo que sucede. Muy buen relato.

Fernando dijo...

Curioso lo de los ñoquis, Juna Ignacio, ¿por qué esa costumbre de tomarlos sólo un día?

Con la normalidad de tener que andar 20 minutos a la ida y otros tantos a la vuelta, Andy, pero peor lo tuvo quien vivía fuera de Madrid.

Así es, Alemamá, fue algo impactante ver la puerta cerrada y tener que salir fuera a tomar el café-droga. En fin, ya pasó.

Juan Ignacio dijo...

No lo sé, tampoco es una costumbre tan arraigada, es más normal decirlo que hacerlo...

Fernando dijo...

Vaya...