jueves, 9 de junio de 2016

Libro, radio, trabajo, dolores, fútbol

Por segunda vez en un año leo "El guardián entre el centeno", de Sallinger. Se supone que es una novela para jóvenes: la leí entonces y no me interesó nada. Ahora sí. Quizá me recuerda al hijo que no he tenido.

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La radio habla continuamente de la campaña electoral. Aunque soy adicto la tengo que apagar para no caer en la depresión.

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Me quedo sin nada que hacer en el trabajo. Qué desesperación.

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Deja de dolerme la rodilla. Empieza a dolerme el píe. Ya no me duele la boca. Pronto me dolerá la espalda. Vejez.

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La selección española parte hacia la Eurocopa de fútbol. Me acuerdo de la novela de García Márquez: "Crónica de una muerte anunciada".

7 comentarios:

Luisa dijo...

Pues lo que deseo de todo corazón es que la Eurocopa se desarrolle con paz y normalidad. Estoy un poco inquieta.

No tener trabajo en el trabajo es desesperante, ciertamente, a mi me cansa muchísimo, prefiero de todas todas tener trabajo de más que de menos. En fin.

Curiosamente añoramos lo que no tenemos y cuando lo tenemos no lo valoramos...somos un paquete jajajaja

Besos, muchos

ojo humano dijo...

La salud mejorará, no lo dudes, el trabajo llegará pero de la política tengo serias dudas. Y el fútbol es siempre una caja de sorpresas, hace unos días pensaba en nuestra selección que no ve una, perdimos de nuevo, después de ser los campeones de Copa América. Nuestra vida está anclada a la Presencia de Dios, de otra manera todo perece (o es) un tanto banal.
Es bueno leer, estos días memorizo Isaías 53, me esfuerzo mucho para ver si logro recitarlo en una fiesta que nuestra comunidad hace en septiembre.
Abrazos.
(Busca otra radio, no la del odio, por favor)

Kris Kelvin dijo...

Hola, Fernando.

Tengo un poco abandonado internet, aunque cuando "blogueo" siempre te leo. ¡Qué curioso que coincidamos en releer "El guardián entre el centeno". Creo que a mi me ha gustado más ahora que cuando lo leí con menos años.

Un abrazo y ánimo con el trabajo y los dolores. Todo pasa.

Fernando dijo...

Es para estar preocupado, Luisa: Francia es muy grande, no se puede controlar todo, y esa gente busca cualquier ocasión para dar un susto. Y sí, es una pena no valorar todo lo bueno cuando lo tenemos, no cuando lo perdemos.

La clave es lo de la presencia de Dios, Ojo Humano: ayer tenía el día un poco depre, quizá debiera haber esperado a hoy para escribir el post. Buscaré la cita de Isaías, no sé cuál es.

Me alegro de verte, Kris. Cuando lo leí de joven me pareció un libro tonto, pero al volverlo a leer hace unos meses me impresionó, ahora lo vuelvo a leer. Y gracias por los buenos deseos, sí, todo pasa, lo bueno y lo malo, incluso de un día para otro.

Babunita dijo...


Nos gusta la dinámica en el lenguaje de El Guardián Entre el Centeno.

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Señor, ten piedad de nosotros.

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Seguro que se le ocurre algo bueno que hacer con el tiempo.

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Hace como cinco o seis años que empezamos a tener que cambiar varias veces a lo largo de la noche de postura. Con anterioridad en la posición que caíamos, amanecíamos. Es curioso porque esto nos a ocurrido a mamy y a mi a la vez.

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Esperamos que el papelón no sea tan desastroso como en Brasil.

ALMA dijo...

Ayyyy Fer!!! La vejez y.los achaques!!!!!

Creo que a nuestra edad ( estoy más cerca de los 60 que de los 30, ja!) la podríamos llamar " edad crujiente ". Nos duele o nos hace ruido nuestras articulaciones, nuestro esqueleto se queja.

No se como saldrá este comentario, lo escribo desde mi teléfono móvil.

Fernando dijo...

Ya se me han ocurrido 1.000 cosas, Babunita. Escribí el post un día de depresión, de angustia por el tiempo vacío, pero ya pasó. Exacto lo de la postura, peor es dormirte pensando "que al amanecer no me duela el brazo o la rodilla", esto es así. Y no creo que nos vaya mucho mejor que en el Mundial, los indicios no son buenos.

Así es, Alma, a veces hay crujidos como de casa de fantasmas. Lo importante es seguir adelante y dar gracias a Dios por cada día de salud que nos toca. El comentario salió bien, aunque repetido.