Me levanto feliz: mi equipo, el Deportivo de La Coruña, ha evitado bajar a Segunda por un milagro de última hora.
Me pongo la camisa azul de los días felices.
Misa solemne de Pentecostés. A mi lado se sienta un cartero vestido de cartero. Tienen jornada laboral, pese a ser domingo, para llevar los votos por correo al colegio electoral.
Voto inútil, sin posibilidad de sacar escaño. Voto emocionado, como siempre. El presidente de la Mesa, al leer mis apellidos, me pregunta si tengo una hija llamada María.
Es curioso. Pese a ser un día histórico lo lleno de mil ocupaciones necesarias: planchar el mantel de los invitados, negociar un regalo de cumpleaños, borrar el subrayado del libro de la biblioteca pública,... Supongo que cuando me queden pocos días para morirme pasara lo mismo.
Los datos de media tarde ya son pesimistas: en Madrid están votando sobre todo los distritos obreros del sur.
Muy entrada la noche se confirma: veinte años después la izquierda vuelve a gobernar el Ayuntamiento y (probablemente) la Comunidad de Madrid. Siento temor por la Iglesia: impuestos, edificios, colegios, procesiones,...
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6 comentarios:
...me pregunto si tus apellidos suenan a jaculatorias de la Virgen. ;)
Felicidades por lo del fútbol.
Y la política, lo siento, espero que no les trastorne mucho la vida. Dios te dé gracia y sabiduría para vivir bien la vida que te queda, que por cierto, espero que sea muchos años felices.
Me acordé de vos, en el momento que estaba ocupada con algún quehacer doméstico y escucho por la radio un comentario respecto a La Coruña, inmediatamente vino a mi mente tu nombre.
Sos joven y bello, como para pensar en la muerte.
Has festejado tu cumpleaños?
De ninguna de las maneras, Tomae: María es la hija de un primo mío, cuyo colegio está cerca de mi casa. Pero me hizo gracia.
Gracias, Ojo Humano, los nuevos tiempos no me preocupan por mí, pues soy feliz y pido poco, sino por España en general y por la Iglesia en particular.
Qué amable, Alma, por lo del Deportivo y por lo de la juventud. Y no, ¿por qué dices lo del cumpleaños? Vino gente a cenar a casa, puse el mantel bueno, pero no era por celebrar nada concreto.
Respecto de lo que comentabas, Chile en general es bastante tranquilo, aunque a veces no se sabe si habrá algo en el camino, un accidente, una protesta o un atentado en el Metro. Es una lástima. Tampoco la delincuencia ha disminuido, y hemos crecido menos, pero somos optimistas que podemos revertir esta baja.
Gracias por la aclaración, Ojo Humano.
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