Ya os conté mi pena cuando el Ayuntamiento taló los árboles de mi calle.
Hace poco ha plantado unos nuevos, bajos, poco más altos que yo, delgados. Ahora, con la primavera, les han salido sus primeras hojitas. Ya les he cogido cariño.
La vida siempre sigue adelante, pese a todo.
jueves, 9 de abril de 2015
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11 comentarios:
Ésa es nuestra esperanza siempre, Fernando, que la vida sigue su curso a pesar de que a veces se tenga que cortar de raíz.
Besos
¡Madre mía, si le tomas cariño a un arbolito en tan poco tiempo es que tienes un corazón muy grande!
Si no dan buenos frutos, al menos que den buenas sombras, aunque eso será a la vuelta de...
Besos, muchos.
Es el triunfo de la naturaleza, Fer.
De a poco, esos flacuchos se van incorporando al paisaje y a través de su crecimiento imperceptible pero constante están diciendo: Aquí estamos!!!
El amor le hace bien hasta a los árboles.
Y son tan buenos amigos...qué bien.
Mientras no sea la raíz de la vida, Yeste, todo va bien.
Les veo a diario, Luisa, y quedan años para que den buena sombra. Por algo se empieza, siempre.
A ver si los veo cuando estén crecidos, Alma.
Toda la naturaleza nos recuerda de continuo que Dios la ha creado y que Dios está cerca, Ojo Humano.
Esto es amor, quien lo probó lo sabe.
Crecen rápido Fernando y estos puedes decir que los conoces desde chiquititos
Estoy de visita. Me extraña que no escribas. ¿ Todo bien ? Un abrazo
Donde andas Fernando?
Por donde andás, Fernando?
Gracias por tu interés, Alma.
Gracias por tu interés, María Jesús.
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